Capítulo 102:

Cuando abrí los ojos, Lilith y Tye me estaban mirando. Él se sentó en el borde de la cama y colocó su mano en mi frente.

—¿Cómo te sientes? —preguntó.

—Estoy bien, cansada pero no tan cansada como me he sentido últimamente —respondí y él sonrió.

—¿De qué se ríen ustedes dos? —pregunté. ¿Pasó algo...

Inicia sesión y continúa leyendo