Capítulo seis:

Stephen POV:

—Bien, pueden empezar en la mañana, divídanse en cuatro y extiéndanse un poco. Los Guardianes estarán arriba para que se sientan un poco más seguros. Sigan aplicando el producto para cubrir su olor hasta que salgan. Descansen y coman algo. Turnos de doce horas cada uno, así que necesitarán su energía —dijo Collin en voz alta. Mientras todos se iban, respiré hondo.

—¿Vamos a ver qué están haciendo nuestras damas? —preguntó Devin.

—¿Qué tal si les pongo al tanto de los demás? —respondió Xander acercándose con Jackson y Tye.

—Esto debería ser bueno —murmuró Collin.

—Han ideado muy buenos planes y es seguro decir que están prosperando —dijo Jackson.

—Uno incluso atrapó a un infectado —dijo Tye, captando toda nuestra atención.

—¿Qué hicieron qué? —preguntó Pierce.

—¿Por qué no estamos allí entonces? —preguntó Austin.

—Porque ya está muerto, fue asqueroso, honestamente, como un charco de alquitrán —respondió Xander.

—Eso no suena muy atractivo. ¿Es lo que normalmente les pasa? —pregunté.

—Sí, una vez que sus cuerpos se apagan por la infección que invade su sangre. Nunca he visto a uno morir realmente, así que no estoy seguro si simplemente se derriten o explotan —respondió Xander, encogiéndose de hombros.

Sentí que mi cara se arrugaba al pensarlo. Suena absolutamente repugnante.

—¿Cómo van las cosas por aquí? —preguntó Jackson.

—Van bien. Reunimos un equipo de rastreadores, los dividimos en equipos, pero empezarán mañana. Le dije a Baine que los demás descansaran —respondí.

Xander y Jackson se miraron.

—Buena decisión, iba a enviar un equipo nuevo, pero estamos un poco escasos de personal ahora mismo —respondió Xander.

—No estoy seguro si me escuchó, aunque Qetsiyah parecía muy tensa antes en la oficina y, para ser honesto, se ven completamente exhaustos —respondí.

—¿Qué hizo Qetsiyah? —preguntó Xander.

—Estaba un poco irritable, nada grave —respondió Devin.

—Siempre está irritable, más cuando está cansada o hambrienta. Hablaré con ella —respondió Xander.

—Estoy bastante seguro de que Alley ya le ha dicho a Ambrosia si están con ellas —respondí.

—Buen punto, iré a asegurarme de que se queden adentro por la noche, nos vemos luego —dijo Xander antes de salir corriendo.

—No puedo creer que atraparon a un infectado. ¿Los terrenos y demás siguen protegidos? —preguntó Austin.

—Sí, y le han añadido un poco de energía extra —respondió Jackson.

—¿Necesitan algo? —preguntó Josh.

—No, escanearé todos los papeles y cosas para que puedan ver por ustedes mismos. Honestamente, han ideado una estructura muy buena —respondió Jackson.

—Eso es bueno de escuchar, tal vez el próximo mes podamos ir todos para verlo —dijo Collin.

—Podemos hacer que eso suceda, vamos —dijo Jackson, caminando hacia la casa.

Al doblar la esquina, pude ver a todas las damas sentadas en una manta, sonriendo y riendo.

Era agradable verlas así, aunque apestaba no saber por cuánto tiempo.

—¿Qué están haciendo, chicas? —pregunté, sentándome detrás de Alley. Ella se recostó en mí y olí su cabello, juro que no podía tener suficiente de ella.

—Solo estábamos hablando de reunir a los niños y demás —respondió Alley.

—Eso sería bueno, estábamos hablando de hacer algo para los guardianes —dijo Collin.

—Eso sería muy lindo, seguro que podemos pensar en algo —respondió Ambrosia con una sonrisa.

—Han estado funcionando con lo mínimo últimamente, prepararé algunas cosas para ellos —añadió Pythia.

—Fui a ver a Lillith, tiene todo funcionando muy bien allá —dije.

—Sí, mantiene a todos en un horario muy estricto. ¿Te consiguió lo que necesitabas? —preguntó Pythia.

—Sí, sin duda, aunque no me di cuenta de que ustedes hacían cosas para olores específicos —dije, sacudiendo la cabeza.

—Ah sí, pensamos que sería mejor así. Nunca sabemos a dónde irá cada uno de nosotros, así que han estado viajando para recolectar cosas —respondió Pythia. Era una idea inteligente. Nunca se me ocurrió hacer algo así.

—Es inteligente. Felicitaciones a ustedes, ¿tal vez podríamos aprender? —preguntó Emma.

—Claro que sí, siempre y cuando tengan una bruja cerca —respondió Pythia.

Una cosa era segura, no nos faltaban brujas de ningún tipo.

—Sí, claro, puedo hablar con el líder de la casa. Gracias —dijo Emma con una sonrisa.

—No hay necesidad de agradecerme, para esto estamos aquí. Cuanto más sepan ustedes, mejor será —respondió Pythia.

—Bien, tenemos un plan de juego, pero ¿cuándo vamos a empezar a actuar? No puedo dejar de pensar en los niños que están atrapados con ellos —bufó Charlotte.

—¿Qué tal si damos otra semana antes de colarnos allí y ver las cosas por nosotros mismos? —preguntó Alley, mirando alrededor.

—Una semana es mejor que un mes, pero juro que si veo a un niño lastimado, haré explotar todo el lugar —murmuró Diane, haciéndome reír. Una cosa que las mujeres hacían mejor era cuidar a los niños, y si los niños estaban en problemas, eran las primeras en aparecer.

—Bien, ¿qué tal si nos reunimos todos los días esta semana, obtenemos los informes y luego podemos formular un plan de ataque? —dijo Alley, poniéndose de pie.

—Eso me parece un buen plan, necesitamos reunir a los niños de todos modos —respondió Collin.

—Tenemos que preparar la cena. Nos vemos mañana —dijo Pythia, saludándonos antes de irse.

—Vamos a recoger a los niños y preparar la cena —susurré al oído de Alley. Saludamos a todos antes de irnos.

—¿Te divertiste con las chicas? —pregunté.

—Sí, fue agradable poder sentarme y hablar con ellas —respondió Alley con una pequeña sonrisa.

—¿Qué pasa, princesa? —pregunté.

—Solo lo que dijo Charlotte. ¿Te imaginas por lo que están pasando esos niños allá? —preguntó Alley.

—No, no puedo, pero los conseguiremos pronto, solo mantén en tu mente que los conseguiremos, pero primero tenemos que tener un plan —dije.

—Lo sé, es solo difícil apartar ese pensamiento —respondió Alley, apoyando su cabeza en mí. Tenía razón, esos niños no hicieron nada para merecer el trato que están recibiendo, pero era aún peor pensar que podrían estar muertos. Tenía que mantener ese pensamiento muy lejos de mi mente porque era lo último que quería, pero ahora necesitábamos idear un plan.