Pensamientos de venganza

Antonio despertó horas después con un fuerte dolor de cabeza. Se sostuvo la cabeza y gimió suavemente de dolor.

—¿Estás bien? —preguntó Margaret y él miró en su dirección.

Ella estaba sentada en una silla, frente a él, mirándolo y sorbiendo lentamente el vino que sostenía en sus manos.

—Tengo un ...

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