7. Fiesta de divorcio

—Hola Mitch —la saluda—. Estoy bien, además de loco, gracias por preocuparte.

—Lo siento, me alegra que estés bien, pero ¿cómo se te ocurrió mandarle a Ian una cuatrimoto de regalo?

—Fue su cumpleaños y no pude asistir —se justifica.

—Por supuesto que no pudiste asistir, si siempre estás metido en ...

Inicia sesión y continúa leyendo