Obsesionado con esa zorra

—¿Esa zorra volvió?

¿Ni siquiera podía bañarse antes de enfrentarlo? Henry se encogió de hombros y se dejó caer en la cama.

—¡No te atrevas a ignorarme, Henry! —Kathleen estaba realmente enojada esta vez—. He estado aguantando tu comportamiento estúpido por un tiempo. ¿Qué te crees que soy? —Sus oj...

Inicia sesión y continúa leyendo