Capítulo 128

Tras una sonrisa más, Adonai deja la habitación dejándome solo con Kat y con Pierre, quien ya me lleva buena ventaja en el tema de dormir.

En cuanto a mi pequeña cachorra, ella se aferra mí con una fuerza increíble.

–Serás una increíble guerrera mi cachorra –susurro tras besar su frentecita antes ...

Inicia sesión y continúa leyendo