Capítulo 39

Lo admito, ver como su rostro se descompone, me llena de satisfacción.

Raine es sólo mía.

¿Cómo se atreve a tocarla así?

–Debes estar bromeando...–masculla el hombre frente a mí –Raine, ¿es eso cierto? –

Confiado en que Raine responderá y confirmará lo que acabo de decir, decido guardar silencio...

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