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CAPITULO 08

Darién sabía que sus años aumentaban.

El Reino de Esrud solo tenía una familia de máximo poder y Linaje importante a diferencia de otros Reinos del mundo.

Esa era la familia Real del Linaje Dorrerbell.

Por esa razón Darién sabía que pronto le pedirían presentar un heredero para que la paz del Reino se siga manteniendo. Era un tema muy delicado y que Darién no podía ni siquiera imaginar.

El no se había acostado con una mujer desde hacía cinco años. La última con la que tuvo sexo fue con Ginelly, desde entonces incluso su deseo sexual había disminuido gradualmente.

Pero su médico Harry decía que el se encontraba muy bien y probablemente su impotencia se debía al estrés y cansancio aún así lo mantenía en tratamiento para evitar cualquier problema mayor, después de todo Darién era aún muy joven.

Pero desafortunadamente el ni siquiera podía dormir muchas horas, sufría de trauma del sueño. Las pesadillas con la muerte de su amada mujer nunca abandonan su cabeza y lo torturaban todas las noches.

El cuerpo borroso y ensangrentado de la última vista que tuvo de ella era su peor tortura.

¿Pude hacer algo más?

¿Si no me hubiera ido eso noche y me hubiera quedado contigo?

"Salí a dar una caminata al jardín principal, quería tomar un poco de aire, tenía problemas con la aprobación para que nos casemos y eso me tenía estresado…No debí hacerlo" Pensó Darién.

Esos eran algunos de los pensamientos que seguían en la mente del Rey Darién actualmente.

Ahora, cinco años después, él seguía sufriendo por ello.

Los minutos pasaban y ya faltaba poco para la reunión con su hermano Nelly y la nueva mujer que sería ahora su sexta esposa.

Cada vez se sentía más presionado y más mal.

Estoy comenzando a arrepentirme…la sola idea de llamar a otra "esposa" la odio<<

Esa frase paso por la cabeza de Darién las cinco ocasiones anteriores en las que el se había casado con esas mujeres. Ahora, nuevamente tenía el mismo pensamiento.

Poco antes de la muerte de Ginelly.

Darién intentaba convertirla en su esposa y atravesaba una lucha contra las leyes, su padre, Linaje y consejeros reales que lo tenía muy estresado.

Ella iba a ser la única esposa y Reina.

Ella iba a ser la madre de sus hijos.

Ella sería la que le dé un heredero.

Ella sería su compañera de vida.

En ese instante los pensamientos de Darién fueron abruptamente interrumpidos.

La puerta se abrió e ingreso su hermano Nelly muy sonriente como de costumbre.

— No te haré perder mucho tiempo hermano.

Dijo el Rey Nelly al Rey Darién.

— Pasa ya mismo Imery. No hagas esperar al Rey Darién.

Tap, tap, tap.

Resonaban los pasos de la futura sexta esposa, ingresando al salón.

Imery Klou.

Hermosa mujer de un cabello largo hasta su cintura y ondulado de un radiante color negro. Cuyos ojos verdes eran como dos esmeraldas preciosas, Imery tenía un cuerpo delgado bastante flexible y fortalecido al ser una soldado en las fuerzas militares del Reino de Chirth en el continente guerrero.

Ella venía de una talentosa familia que había servido en la milicia por muchas generaciones, todos hombres y mujeres muy capaces e inteligentes. Ella no era una excepción para nada, al contrario era todo un orgullo.

Sin embargo cierto día su carrera militar caería desplomada por una estúpides.

Imery aún era joven, una señorita en la sección militar de "rastreos" que se encargaban de encontrar infiltrados en su Reino y capturarlos para que después se decida que hacer con ellos.

Por supuesto solo a esos infiltrados de Reinos enemigos. Imery tenía un grupo de compañeros fijos para la mayoría de sus misiones, los cuales eran alrededor de cinco a seis. Ya que si uno era lastimado, se lesionaba o moría otro lo sustituiría.

La reputación de la joven de dieciocho años estaba por los cielos. Era muy guapa, bastante inteligente y una experta en el manejo de armas del Reino, especialmente sustancias tóxicas.

Pero ese día donde todas sus desgracias comenzarían llegó.

Imery se enamoró.

Ella quedó perdidamente enamorada de su compañero con el que llevaba un año trabajando en el mismo escuadrón. El joven de cabello castaño y ojos grises se llamaba "Zerek" alguien de una mala reputación, ya que se decía era muy vago y tomaba bastante.

Un comportamiento así no estaba permitido ni bien visto en las bases militares del Reino de Chirth. Después de completar la última misión del mes ese escuadrón tendría una semana de descanso, pero antes de separarse decidieron pasar a un bar a tomar y disfrutar juntos.

Eran solo jóvenes y querían diversión.

¿Quién podría jugarlos por ello?

Imery tomo y bailó esa noche a más no poder y al final luego de uno que otro coqueteo terminó yendo a un hotel con su compañero Zerek donde tuvieron sexo.

No era un gran problema para ninguno de los dos, se gustaron y solo una semana después comenzaron a ser novios oficialmente.

Paso un año más y ellos comenzaron a planear su boda, creyendo que era el mejor momento para hacerlo. Sin embargo Zerek fue cambiado de escuadrón con el nuevo ingreso de soldados jóvenes a los que los más mayores debían guiar y ayudar.

Imery no dudo ni un solo instante en qué lograrían llevar su relación aunque se vieran muy poco tiempo ahora cada uno en distintos escuadrones como cabezas de ellos.

Imery hacía un trabajo impecable y junto a sus compañeros comenzaron a mejorar mucho más su reputación. Por otro lado Zerek era más y más regañado deteriorando su desempeño y recibiendo frecuentemente llamados de atención.

— ¡Pasas más tiempo trabajando que conmigo! — Gritó Zerek molesto.

— ¡Ayudo a mi país! ¡Amo mi trabajo y me lo tomo en serio algo que parece que tú no pues solo llegan quejas y nuestros superiores pidiendo que hablé contigo! —Gritaba enojada Imery.

En definitiva la relación de ambos iba a desmoronarse a ese paso. No era para menos, ambos separados, a uno le iba de maravilla y a otro le iba pésimo. Zerek comenzó a salir nuevamente entre misiones a divertirse, solo quería olvidar la mala racha que pasaba y entre esas salidas una de sus jóvenes compañeras comenzó a acompañarlo más y más coqueteando con el joven hombre comprometido.

Su nombre era Layla una chica de dieciséis huérfana que había ingresado desde muy pequeña a la academia militar. Ella estaba en el mismo escuadrón que Zerek y buscaba aprender más de él. Le parecía grandioso y simplemente comenzó a gustarle.

Ambos empezaron a tener un romance ocultó de Imery Klou.

Cuando Imery descubrió la infidelidad en la habitación de estadía para soldados de Zerek, está no lloró, mucho menos se enojó e hizo algún berrinche.

Imery no era así.

Ella sacó su arma y rompiendo las reglas de lastimar a los propios compañeros, disparó a la entrepierna de Zerek.

Falló.

Falló al ser empujada por la joven chica Layla.

Pero fue suficiente el escándalo causado para que suspendieran a Imery y la expulsaran de la milicia hasta nuevo aviso.

Su familia no podía creer que alguien tan talentosa como Imery se dejará llevar por el enojo de ese "simple engaño" como lo llamaron ellos.

Pero Imery confío en Zerek.

¡Ella lo amaba y el se burló de sus sentimientos!

¡El lo oculto jugando con ella mientras tenía relaciones con otra mujer!

…..

Imery Klou había perdido su puesto, su reputación y carrera cayeron, su boda fue cancelada y su amado prometido la engaño y dejo por otra.

Ella finalmente no pudo más. No pudo seguir siendo la fuerte mujer que era y sin ver una luz en su vida lloró.

Su corazón estaba roto, así como su orgullo la hacían sufría en depresión en su hogar. En el cual había pasado semanas que se volvieron meses.

Su padre un ex militar de clase alta y con muchas conecciones no quería ver a su talentosa hija sufrir de esa forma por más tiempo. El conocía al actual comandante general de seguridad del Linaje Real en el Reino de Chirth.

Lo contacto pidiendo un puesto en el servicio al Linaje Real para su hija Imery, pero el no pudo ayudar a la hija de su amigo. No tenían vacantes y el proceso era largo y cuidadoso para cada soldado que servía a la familia Real.

Sin embargo tuvo una idea, la nueva Reina llamada Remi buscaba guarda espaldas y no vendría nada mal una talentosa mujer como Imery. Así que la joven aun decaída por lo que le había sucedido, finamente decidió empezar de cero y aceptar ese puesto para servir a la joven Reina de Chirth.

Cuando Imery conoció a Remi, vió a una frágil y dulce chica de cabello negro largo y lacio y ojos de un marrón muy oscuro. La Reina era muy delicada y sonriente, amable y buena.

Se decía que entró al castillo desde que era una niña como la concubina del en ese ento

nces príncipe Nelly, por supuesto ellos se empezaron a conocer como amigos y naturalmente desarrollaron sentimientos el uno por el otro. Para que finalmente Remi cumpliera con el propósito de llegar al castillo, ser la esposa del ahora Rey Nelly y ella volverse la nueva Reina de Chirth.

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