Capítulo 193

Lo siguiente que supe fue que estaba sentada en una larga mesa de picnic de madera adornada con luces de hadas, rodeada de esta ruidosa y cariñosa multitud, llenándome la boca con brisket, costillas, pan de maíz y ensalada de papa que claramente había sido bendecida por ángeles. Los perros se movían...

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