Capítulo 81

El sonido de nuestra respiración se sincronizaba con el suave tic-tac del reloj y el murmullo de la ciudad más allá de las ventanas. Su mano encontró la mía bajo la manta, sus dedos trazando pequeños círculos en mi palma.

—Lo dije en serio antes —murmuró cerca de mi oído—. Sobre la boda.

Me giré l...

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