30. Mikael

Emmalyn miró alrededor de la gran sala y asintió. La habitación era acogedora e invitante. Tenía sentido para ella. La gente podía reunirse cerca de aquellos a quienes respetaban por encima de todos los demás, pudiendo solicitar su sabiduría si la necesitaban. Pero los ancianos tendrían su propio es...

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