41. Más cerca

Por más que lo intentara, no podía apartar los ojos de su rostro. Sentía un poderoso impulso de tocarlo, de ver si era tan suave como parecía. Era un pensamiento peligroso. Él era comida para ella y acercar su mano a su boca era una movida idiota. Así que apretó los puños a sus costados para contene...

Inicia sesión y continúa leyendo