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Cuando sonó el teléfono de Isabella, ella estaba cenando con James. Ella tomó el teléfono, miró la identificación de la llamada, vio que era el número de David y colgó directamente.

—¿No vas a contestar? —James la miró con sospecha.

—No es necesario —Isabella se encogió de hombros con indiferencia...

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