Hablemos - Parte I

La puerta se abrió y el sonido de las patas de Avalanche sobre el azulejo fue seguido por el paso pesado de los pies de Torq. Ella se puso rígida cuando Brunella le guiñó un ojo y se levantó para continuar preparando el desayuno.

Se sorprendió cuando él se detuvo y le besó la parte superior de la c...

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