Listo para dormir - Parte II

Sus labios se torcieron ante sus palabras.

—Ahora, echemos un vistazo a lo que hay debajo de ellos—. Le quitó el juguete con el que estaba jugando hace unos momentos y lo metió debajo de la almohada. —Eso es para después, cuando esté enterrado profundamente en ti, golpeando tu punto G con mi dura v...

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