Capítulo 13 Anhelando la verdad

—¡Oh no! ¡Otra vez no! —Mathilda se dejó caer en la cama soltando un suspiro pesado—. ¡Odio dormir bajo el mismo techo que gallinas y corderos!

Me reí de su cara larga, tratando de animarla—. Vamos, no es tan malo, Mattie. Los corderos son adorables y te encantarán los paisajes de allí.

—Por el am...

Inicia sesión y continúa leyendo