Capítulo 25

Liliana

El frasco de perfume de cristal se deslizó de mis dedos temblorosos, rompiéndose contra el suelo de mármol de mis aposentos. Su aroma, que alguna vez fue precioso, ahora se volvía empalagoso y nauseabundo en el espacio confinado. La citación de Garrick había llegado con la fuerza de un golp...

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