Capítulo 8: El precio de la desobediencia

Capítulo 8 - El precio de la desobediencia

Punto de vista de Dante

Entro en la habitación y la veo allí. El teléfono en su mano. Y sus ojos abiertos como un ciervo atrapado en los faros. Está congelada. No puede moverse. ¡Vaya! ¿Qué la habrá asustado de esta manera?

Bien. El miedo es lo que mantie...

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