Eficiente

Camila se le quedó viendo a Ricardo, no podía creer que le pidiera de nuevo actuar en esa farsa.

Estoy cansada, Ricardo —dijo, tomándolo por sorpresa.

Ricardo la miró, alzando una ceja.

—Camila, necesito que me ayudes en esto, nadie debe de saber ni sospechar de mi problema.

—Lo sé, pero para eso no...

Inicia sesión y continúa leyendo