Capítulo 226

Olivia

La habitación, tenuemente iluminada por la suave luz de las lámparas de los gemelos, estaba llena del agradable aroma de los bebés y una vela que se colaba por la puerta abierta.

Me senté en la mullida mecedora, su elaborado trabajo de madera trazando intrincados patrones. Pesadas cortinas ...

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