Capítulo 4 Capítulo 4. NO SOY TUYA.

Llegamos a la mansión pasadas las doce. Justo cuando bajo del coche, las luces del garaje se encienden, iluminando la escena como un maldito teatro. Mi madre y Alexander bajan del Mercedes, riendo bajito, con esa complicidad que me clava un cuchillo en el pecho. Ella con el vestido negro que le qued...

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