Capítulo 23 El después

Álvaro Duarte

—Necesito hablar contigo a solas Damiana —su voz era fría, cortante, como una cuchilla afilada.

Mi madre dejó los cubiertos en la mesa con un movimiento seco y calculado. Se irguió con elegancia forzada y le dedicó una sonrisa cargada de veneno.

—Lo que tengas que decir, dilo aquí. ...

Inicia sesión y continúa leyendo