
Cautiva por el despiadado alemán.
Nelsi Diaz · Completado · 277.8k Palabras
Introducción
La muerte de su madre había dejado un vacío en su corazón, y su padre, en un acto de desesperación, había malgastado la fortuna familiar. Kiara se encontró atrapada en una telaraña de deudas, su futuro oscurecido por la sombra de la desesperación.
Un día, su tío la entregó como pago a Bastian Blackwood, el heredero de un clan mafioso. Bastian era un hombre de mirada fría y corazón endurecido. Kiara se convirtió en su esclava, trabajando incansablemente para saldar la deuda que su tío había acumulado. Pero el precio era alto: su libertad y su dignidad.
Lo que Kiara no esperaba era que su exnovio, Jonas, fuera el hermano de Bastian.
Jonas la reclamó como suya, y Kiara se vio atrapada entre dos mundos peligrosos. Bastian, con su aura de peligro y secretos, despertaba en ella emociones prohibidas. Causando sucesos que la llevaron a perderse entre las caricias prohibidas de quién jamás debía caer en los encantos de una esclava.
Lo que dió paso a su pago de una impensable manera. Aunque Kiara fue liberada había algo no dicho que con los años la volvió a encontrar.
El pasado no podía ser ignorado.
Kiara guardaba un secreto que amenazaba con destruir todo lo que conocía. Un secreto que la ataba a Bastian de una manera inesperada. Mientras los celos y las pasiones ardían, Kiara se debatía entre el perdón y el rencor.
¿Podría perdonar el pasado y encontrar la redención? ¿O se hundiría en las profundidades de la traición y el deseo? La vida de Kiara estaba en juego, y las decisiones que tomara la llevarían por un camino sin retorno.
Capítulo 1
__ ¿Solo esto de propinas? - preguntó Camilo cuando revisó el sobre que su sobrina le entregó. - Te estás quedando con lo demás. Tú siempre obtienes más. Dámelo.
__ No me he quedado con nada, tío. Solo que no es una buena temporada para el restaurante y apenas obtengo eso. - contestó viendo el disgusto del hombre que negó como si fuese su culpa.
__ Una inepta es lo que eres. Te pagan por conseguir clientes y ¿así es como respondes? - la tomó del codo para arrastrarla a su dormitorio o lo que parecía serlo, pero no era más que un catre viejo y maloliente que trataba de no ver de ese modo.
Cayó sobre él colchón que rechinó cuando su tío la lanzó a ese sitio.
__ Te quedas ahí y sin comer. - soltó furioso. Esa pequeña cantidad no le bastaba para dejarla tranquila, pero por más que Kiara se esforzara no consiguió llegar a la cantidad predispuesta.
Aún tenía diecinueve años. No faltaba mucho para cumplir sus veinte años y todo parecía eterno para llegar a sus veintiuno que era la edad para quedar fuera del poder de su tío. Todo por culpa del testamento del borracho de su padre, quien no pensó que este le daría una vida tan mediocre a su única hija.
Que inconsciente había sido.
Tan solo bastaban trescientos sesenta y seis días para librarse de él y podría trabajar de algo más, eso no le dió ningún alivio, pero por el momento debía aguantar.
Se aseguró que se hubiese ido para sacar la galleta que comió, sin envoltorio, siempre se los quitó para no ser descubierta, pasando otra noche de esa manera para comenzar otro día de la misma forma.
Jonas, su novio la esperó como todas las tardes después del trabajo entregando una nota para su cita del siguiente día. Ella no dilató mucho en hablar con él, porque su tío medía incluso el tiempo que tardaba en regresar a la casa.
Le entregó un poco de dinero que ella no quería recibir, pero sabía que con eso, al menos pasaría una buena noche y no oyendo sus insultos aun sin verla. No quería eso para la noche anterior a su cumpleaños, por lo que cuando vio la cara de satisfacción de su tío supo que había valido la pena.
Podía escaparse de ese infierno. Lo hizo dos veces antes, pero su tío siempre daba con ella, por eso dejo de intentarlo desde hacía dos años.
Sin embargo, estuvo planeando por meses escaparse con Jonas, pues este le prometió llevarla a un lugar donde ella tendría toda la libertad que quisiera. Ilusionada con eso sacó un poco de ropa cuando podía y con el tiempo tenía la suficiente para poder hacerlo.
Esperó con ansias que pasara su turno de trabajo, atendió a los clientes mejor de lo que lo hacía, llamó la atención de otros y estos dejaron mejores aún. Ese día había sido muy productivo, además que Estefanía le dio un cupcake de colores con una vela que sopló para festejar.
Sonrió todo el día, estaba feliz. Nunca había estado tan alegre, menos emocionada por algo. No desde diez años antes.
Su turno terminó, tomó su morral que ya había reparado varias veces porque su tío no le dejaba dinero para comprar una nueva y caminó a la salida de su trabajo, donde se suponía que Jonas la estaba esperando. No obstante, aún no había llegado.
Caminó hacia el sitio de siempre, buscando un lugar donde pudiera estar sin pensar en que podrían verla huyendo.
La noche era su compañía siempre en ese callejón, esperando a su novio. Pero en ese momento lo único que vio fue un torso desnudo con un tatuaje particular, un símbolo celta, con un cuervo bañado en sangre. Un hombre que rebasó su altura en medio del callejón, estaba viendo la espalda de un asesino y eso le dejó la lengua adormecida.
No era solo tinta, también había sangre fresca. Los músculos en el sujeto le congelaron la sangre, ella caminó hacia atrás con pasos suaves hasta comenzar a correr de regreso. Sin embargo la habían visto, solo que ese sujeto no iba a perseguir a alguien insignificante como veía a todo el mundo.
Kiara quiso encontrar a alguien para decirlo. Estefanía no estaba, su jefe tampoco. Quería a su novio para pedir ayuda.
Pero no fue él a quien vio en ese sitio. Era Camilo, su tío.
Su corazón dejó dejó de latir al verlo, pensando que la había descubierto, quiso preguntar por su novio, por si le habían hecho daño, pero este se portó tan amable con ella, que en lugar de sentirse aliviada, se mostró temerosa.
__ Sube, tengo un lugar que mostrarte. - animó Camilo con su voz amable, aquella que jamás había usado con ella.
__ ¿A donde? - preguntó con cautela. Vio todo con desconfianza.
__ Tu nuevo trabajo. Necesito que pagues algo que debo.
__ No, yo tengo un poco de dinero hoy y puedo...
__ Eso no me sirve, Kiara. - la tomó del codo y ella negó nerviosa. - Son siete millones, perdí un negocio y para hacerlo pedí dinero prestado a quien le prometí el triple y ahora debo pagar.
__ Pero no puedo ganar ese dinero trabajando..- se rehusó a subir al auto de su tío.
__ Lo pagaré. Solo debo ir con mi papá, cuando sepa todo no dudará en darme el dinero. - Kiara supo que mentía.
Su abuelo jamás le daría un centavo más a Camilo. Había echado a perder muchos de sus negocios y se había cansado de darle dinero, estaba perdida, por lo que no quería averiguar de qué la pensaba meter a trabajar. Tanta insistencia ya le daba indicios.
Se soltó de su tío y aferrada a su morral corrió, pero pronto fue alcanzada por él, quien la tomó del nacimiento de su cabello y la soltó al ver que llamó la atención.
__ No te comportes como si no me debieras el haberte dado de comer todos estos años. Me debes mucho, Kiara. - declaró. - No queremos que tenga que vender la casa de papá para pagar la deuda ¿no?
Ella se contuvo. No luchó más.
Esa casa era todo lo que sus padres le dejaron. No quería por ningún motivo perderla y su tío tenía el poder para hacerlo hasta que cumpliera los veintiún años, aún faltaba para eso.
__ Eso es. Vamos tranquilos, como tío y sobrina al auto, que nos esperan. - le acarició la cabeza haciéndola entrar al vehículo del cuál cerró la puerta.
Buscó a Jonas por todos lados, ignorando el sonido del motor, pero nada de eso le fue de ayuda cuando lo encontró atrás de un auto con los ojos fijos en ella, tuvo el impulso de correr hacia a él, pero este negó.
No pensaba arriesgarse por ella. Kiara percibió la respuesta y sus lágrimas se deslizaron por sus mejillas.
Le había prometido salvarla de su tío, pero no lo hizo. Sus sollozos quemaron su pecho cuando no los quiso dejar salir. Había sido una tonta.
¿Como fue tan ingenua de creerle?
Nadie había cumplido las promesas antes ¿porque Jonas sí lo podía hacer?
Se abrazó a sí misma cuando lo vio por última vez, este ni siquiera se esforzó un poco. Dejando que su tío la llevara a algún sitio de la ciudad, en donde después de aparcar el vehículo la hizo bajarse para llevarla con él al edificio con aspecto victoriano al cual entraron.
No tardó mucho en ver cómo las cadenas hacían parte de la pared, como si fuese para perros, pero los canes presentes andaban sueltos. Mirando con horror el escudo que había en la pared cuando abrieron la última puerta.
La triada de la sangre negra, una de las pandillas conocidas por ser despiadada y sanguinaria en toda Alemania. Eran integrantes de ellos.
__ ¿Ella es tu pago? - le preguntó un hombre de tatuajes en la cara a su tío. - Se ve muy escuálida. No servirá para trabajos pesados.
__ Puede con todo. - alegó su tío y en ese momento le dió terror esa respuesta.
__ Veremos si con todo. - dijo una voz que salió de la nada, ella se giró para ver al hombre de altura predominante casi para aplastarla si no la veía, rostro endurecido como si estuviera furioso, facciones sombrías, un abrigo de piel sobre los hombros y cabello de un oscuro castaño que se veía húmedo pese a no estarlo, desbordando el olor amaderado que se esparció alrededor suyo.
Ni siquiera la miró. Pero todo se veía pequeño a su lado, ella aún más.
__ Santos, llévala a que se vista adecuadamente. - ordenó el sujeto. - Camilo, recuerda que si no me pagas en dos meses como propusiste, no solo tu moneda de cambio morirá.
A Kiara dejó de importarle lo que este había dicho, implorando a su tío sacarla de ahí, pero este no le hizo caso, en absoluto. Dejando a su sobrina con una deuda que no era suya, quien deseo la forma de escapar de ahí, pero cuando el collar de esclava se cerró sobre su cuello, supo que no la encontraría.
No había salida y nadie iba a abogar por ella.
Últimos capítulos
#125 Extra: Mellizos.
Última actualización: 2/27/2025#124 Capítulo extra: Un amor oscuro.
Última actualización: 2/27/2025#123 Capítulo extra: Una tormenta oscura y radiante.
Última actualización: 2/27/2025#122 Capítulo 122
Última actualización: 2/27/2025#121 Capítulo 121
Última actualización: 2/27/2025#120 Capítulo 120
Última actualización: 2/27/2025#119 Capítulo 119
Última actualización: 2/27/2025#118 Capítulo 118
Última actualización: 2/27/2025#117 Capítulo 117
Última actualización: 2/27/2025#116 Capítulo 116
Última actualización: 2/27/2025
Te podría gustar 😍
Fuera de Límites, Mejor Amigo del Hermano
—Vas a tomar cada pulgada de mí. —Susurró mientras empujaba hacia arriba.
—Joder, te sientes tan jodidamente bien. ¿Es esto lo que querías, mi polla dentro de ti? —Preguntó, sabiendo que lo había estado tentando desde el principio.
—S..sí —jadeé.
Brianna Fletcher había estado huyendo de hombres peligrosos toda su vida, pero cuando tuvo la oportunidad de quedarse con su hermano mayor después de graduarse, allí conoció al más peligroso de todos. El mejor amigo de su hermano, un Don de la mafia. Él irradiaba peligro, pero ella no podía mantenerse alejada.
Él sabe que la hermanita de su mejor amigo está fuera de límites y, sin embargo, no podía dejar de pensar en ella.
¿Podrán romper todas las reglas y encontrar consuelo en los brazos del otro?
Mi Luna Marcada
—Sí.
Exhala, levanta su mano y la baja para abofetear mi trasero desnudo de nuevo... más fuerte que antes. Gimo por el impacto. Duele, pero es tan excitante y sexy.
—¿Lo harás de nuevo?
—No.
—¿No, qué?
—No, Señor.
—Buena chica —acerca sus labios para besar mi trasero mientras lo acaricia suavemente—.
—Ahora, voy a follarte —me sienta en su regazo en una posición de monta. Nos miramos a los ojos. Sus largos dedos encuentran el camino hacia mi entrada e insertan sus dedos.
—Estás empapada por mí, nena —dice complacido. Mueve sus dedos dentro y fuera, haciéndome gemir de placer.
—Hmm —pero de repente, se van. Lloro mientras deja mi cuerpo ansiando por él. Cambia nuestra posición en un segundo, así que estoy debajo de él. Mi respiración es superficial y mis sentidos incoherentes mientras anticipo su dureza en mí. La sensación es fantástica.
—Por favor —suplico. Lo quiero. Lo necesito tanto.
—Entonces, ¿cómo te gustaría venirte, nena? —susurra.
¡Oh, diosa!
La vida de Apphia es dura, desde ser maltratada por los miembros de su manada hasta que su compañero la rechaza brutalmente. Está sola. Golpeada en una noche difícil, conoce a su segunda oportunidad de compañero, el poderoso y peligroso Alfa Lycan, y vaya que le espera la aventura de su vida. Sin embargo, todo se complica cuando descubre que no es una loba común. Atormentada por la amenaza a su vida, Apphia no tiene otra opción que enfrentar sus miedos. ¿Podrá Apphia derrotar la iniquidad que amenaza su vida y finalmente ser feliz con su compañero? Sigue para más.
Advertencia: Contenido maduro.
El Deseo Prohibido del Rey Licántropo
Esas palabras salieron cruelmente de la lengua de mi destinado—MI COMPAÑERO.
Él robó mi inocencia, me rechazó, me apuñaló y ordenó que me mataran en nuestra noche de bodas. Perdí a mi loba, dejada en un reino cruel para soportar el dolor sola...
Pero mi vida dio un giro esa noche—un giro que me arrastró al peor infierno posible.
Un momento, era la heredera de mi manada, y al siguiente—era una esclava del despiadado Rey Lycan, que estaba al borde de perder la cordura...
Frío.
Mortal.
Implacable.
Su presencia era el infierno mismo.
Su nombre un susurro de terror.
Juró que yo era suya, deseada por su bestia; para satisfacerlo incluso si me rompe
Ahora, atrapada en su mundo dominante, debo sobrevivir a las oscuras garras del Rey que me tenía bajo su control.
Sin embargo, dentro de esta oscura realidad, yace un destino primitivo....
De Mejor Amigo a Prometido
Una semana de boda en New Hope. Una mansión llena de invitados. Y una dama de honor muy resentida.
Para sobrevivir, Savannah lleva una cita —su encantador y pulcro mejor amigo, Roman Blackwood. El único hombre que siempre la ha apoyado. Le debe un favor, y fingir ser su prometido? Fácil.
Hasta que los besos falsos empiezan a sentirse reales.
Ahora Savannah está dividida entre mantener la farsa… o arriesgarlo todo por el único hombre del que nunca debió enamorarse.
Dura en Disfraz
—Jade, necesito revisar tu—comenzó la enfermera.
—¡FUERA!—gruñí con tanta fuerza que ambas mujeres retrocedieron hacia la puerta.
Una vez temida por la Organización Sombra que me drogó para replicar mis habilidades en una versión más controlable, había escapado de mis ataduras y detonado toda su instalación, lista para morir junto a mis captores.
En cambio, desperté en la enfermería de una escuela con mujeres discutiendo a mi alrededor, sus voces perforando mi cráneo. Mi estallido las congeló de shock—claramente no esperaban tal reacción. Una mujer amenazó mientras se iba—Discutiremos esta actitud cuando llegues a casa.
La amarga verdad es que he renacido en el cuerpo de una chica de secundaria con sobrepeso, débil y supuestamente tonta. Su vida está llena de acosadores y verdugos que han hecho su existencia miserable.
Pero no tienen idea de con quién están tratando ahora.
No sobreviví como la asesina más letal del mundo permitiendo que alguien me pisoteara. Y ciertamente no voy a empezar ahora.
Yo y Mi Esposo Multimillonario
Después de lidiar con hombres indignos y mujeres despreciables, Aurora está lista para vivir su vida libremente y sin disculpas. Pero el distante y misterioso Heath se acerca con una pregunta que lo cambia todo:
—¿Cuándo nos casamos?
La Cachorra del Príncipe Licántropo
—Pronto estarás rogándome. Y cuando lo hagas—te usaré como me plazca, y luego te rechazaré.
—
Cuando Violet Hastings comienza su primer año en la Academia de Cambiantes Starlight, solo quiere dos cosas: honrar el legado de su madre convirtiéndose en una sanadora hábil para su manada y pasar por la academia sin que nadie la llame rara por su extraña condición ocular.
Las cosas toman un giro dramático cuando descubre que Kylan, el arrogante heredero al trono de los Licántropos que ha hecho su vida miserable desde el momento en que se conocieron, es su compañero.
Kylan, conocido por su personalidad fría y sus maneras crueles, está lejos de estar contento. Se niega a aceptar a Violet como su compañera, pero tampoco quiere rechazarla. En cambio, la ve como su cachorrita y está decidido a hacer su vida aún más un infierno.
Como si lidiar con el tormento de Kylan no fuera suficiente, Violet comienza a descubrir secretos sobre su pasado que cambian todo lo que pensaba que sabía. ¿De dónde viene realmente? ¿Cuál es el secreto detrás de sus ojos? ¿Y ha sido toda su vida una mentira?
Perfecto bastardo
—Dime que no te acostaste con él, maldita sea —exigió entre dientes apretados.
—¡Vete al diablo, hijo de puta! —le respondí, intentando liberarme.
—¡Dilo! —gruñó, usando una mano para sujetar mi barbilla.
—¿Crees que soy una zorra?
—¿Entonces es un no?
—¡Vete al infierno!
—Bien. Eso es todo lo que necesitaba escuchar —dijo, levantando mi top negro con una mano, exponiendo mis pechos y enviando una oleada de adrenalina a través de mi cuerpo.
—¿Qué demonios estás haciendo? —jadeé mientras él miraba mis pechos con una sonrisa satisfecha.
Pasó un dedo sobre una de las marcas que había dejado justo debajo de uno de mis pezones.
¿El bastardo estaba admirando las marcas que me había dejado?
—Envuélveme con tus piernas —ordenó.
Se inclinó lo suficiente como para tomar mi pecho en su boca, chupando con fuerza un pezón. Me mordí el labio inferior para ahogar un gemido mientras él mordía, haciéndome arquear el pecho hacia él.
—Voy a soltar tus manos; no te atrevas a intentar detenerme.
Bastardo, arrogante y completamente irresistible, el tipo exacto de hombre con el que Ellie juró que nunca volvería a involucrarse. Pero cuando el hermano de su amiga regresa a la ciudad, se encuentra peligrosamente cerca de sucumbir a sus deseos más salvajes.
Ella es irritante, inteligente, sexy, completamente loca, y también está volviendo loco a Ethan Morgan.
Lo que comenzó como un simple juego ahora lo atormenta. No puede sacarla de su cabeza, pero nunca permitirá que nadie entre en su corazón de nuevo.
Incluso cuando ambos luchan con todas sus fuerzas contra esta ardiente atracción, ¿podrán resistirse?
Placeres culposos
¿Todo ha sido un error? ¿O quizás solo parte del destino? La ida por un vaso de agua, resultó en el inicio de un deseo culposo con consecuencias irreversibles.
Soy Erika Martín de 21 años, soy una latina, proveniente de Venezuela, me mudé de mi país buscando el sueño Americano ante una oportunidad de empleo como servicio doméstico en la mansión uzcategui, sin saber que mi destino cambiaría por completo, al conocer a Alejandro Uzcategui, el heredero y magnate de negocios más prestigioso dela ciudad, con una ciudad tan grande y él puso sus ojos en mi, su humilde y tímida empleada, que no sabe decirle que no, todo con él era perfecto, pero él tiene dos grandes defectos, es casado y jodidamente posesivo, me llama bomboncito y me reclama como suya. Estoy locamente enamorada de él y temo por la repercusiones de lo que vendrá, ya que se que no me dejará escapar, menos cuando sepa mi gran secreto.
Accardi
—Te costará algo —susurró antes de tirar de su lóbulo con los dientes.
Sus rodillas temblaron y, si no fuera por su agarre en su cadera, habría caído. Él empujó su rodilla entre sus muslos como un soporte secundario en caso de que decidiera necesitar sus manos en otro lugar.
—¿Qué quieres? —preguntó ella.
Sus labios rozaron su cuello y ella gimió mientras el placer que sus labios provocaban se hundía entre sus piernas.
—Tu nombre —exhaló él—. Tu verdadero nombre.
—¿Por qué es importante? —preguntó ella, revelando por primera vez que su corazonada era correcta.
Él se rió contra su clavícula.
—Para saber qué nombre gritar cuando vuelva a entrar en ti.
Genevieve pierde una apuesta que no puede pagar. Como compromiso, acepta convencer a cualquier hombre que su oponente elija para que se vaya a casa con ella esa noche. Lo que no se da cuenta cuando el amigo de su hermana señala al hombre taciturno sentado solo en el bar, es que ese hombre no se conformará con solo una noche con ella. No, Matteo Accardi, Don de una de las pandillas más grandes de la ciudad de Nueva York, no hace encuentros de una sola noche. No con ella, de todos modos.
La Pequeña Pareja de Alfa Nicholas
¿Qué? No—espera… oh Diosa Luna, no.
Por favor, dime que estás bromeando, Lex.
Pero no lo está. Puedo sentir su emoción burbujeando bajo mi piel, mientras que todo lo que siento es pavor.
Doblamos la esquina y el aroma me golpea como un puñetazo en el pecho—canela y algo increíblemente cálido. Mis ojos recorren la habitación hasta que se posan en él. Alto. Imponente. Hermoso.
Y luego, tan rápido como… me ve.
Su expresión se tuerce.
—Joder, no.
Se da vuelta—y corre.
Mi compañero me ve y corre.
Bonnie ha pasado toda su vida siendo destruida y abusada por las personas más cercanas a ella, incluida su propia hermana gemela. Junto a su mejor amiga Lilly, que también vive una vida de infierno, planean escapar mientras asisten al baile más grande del año que está siendo organizado por otra manada, solo que las cosas no salen como planeaban, dejando a ambas chicas sintiéndose perdidas e inseguras sobre su futuro.
El Alfa Nicholas tiene 28 años, sin compañera, y no tiene planes de cambiar eso. Este año le toca organizar el Baile Anual de la Luna Azul y lo último que espera es encontrar a su compañera. Lo que espera aún menos es que su compañera sea 10 años menor que él y cómo su cuerpo reacciona ante ella. Mientras intenta negarse a reconocer que ha encontrado a su compañera, su mundo se pone patas arriba después de que los guardias atrapan a dos lobas corriendo por sus tierras.
Una vez que las traen ante él, se encuentra nuevamente frente a su compañera y descubre que ella esconde secretos que lo harán querer matar a más de una persona.
¿Podrá superar sus sentimientos hacia tener una compañera y una que es tan joven? ¿Su compañera lo querrá después de sentir el dolor de su rechazo no oficial? ¿Podrán ambos trabajar en dejar atrás el pasado y avanzar juntos o tendrá el destino otros planes y los mantendrá separados?
Le Di una Bofetada a Mi Prometido—Luego Me Casé con su Némesis Multimillonario
Técnicamente, Rhys Granger era mi prometido ahora—millonario, increíblemente atractivo y un sueño húmedo de Wall Street. Mis padres me empujaron hacia el compromiso después de que Catherine desapareciera, y honestamente? No me importó. Había estado enamorada de Rhys durante años. Esta era mi oportunidad, ¿verdad? ¿Mi turno de ser la elegida?
Error.
Una noche, me abofeteó. Por una taza. Una estúpida, rota y fea taza que mi hermana le dio hace años. Fue entonces cuando me di cuenta—él no me amaba. Ni siquiera me veía. Solo era un reemplazo cálido para la mujer que realmente quería. Y aparentemente, ni siquiera valía tanto como una taza de café glorificada.
Así que lo abofeteé de vuelta, lo dejé y me preparé para el desastre—mis padres perdiendo la cabeza, Rhys teniendo una rabieta de millonario, su aterradora familia planeando mi prematura desaparición.
Obviamente, necesitaba alcohol. Mucho alcohol.
Entra él.
Alto, peligroso, injustamente atractivo. El tipo de hombre que te hace querer pecar solo por existir. Lo había conocido solo una vez antes, y esa noche, él simplemente estaba en el mismo bar que mi yo borracha y compadeciéndose de sí misma. Así que hice lo único lógico: lo arrastré a una habitación de hotel y le arranqué la ropa.
Fue imprudente. Fue estúpido. Fue completamente desaconsejado.
Pero también fue: El. Mejor. Sexo. De. Mi. Vida.
Y, como resultó, la mejor decisión que había tomado.
Porque mi aventura de una noche no es solo un tipo cualquiera. Es más rico que Rhys, más poderoso que toda mi familia, y definitivamente más peligroso de lo que debería estar jugando.
Y ahora, él no me va a dejar ir.












