Capítulo 184: Excepción rara

La última mañana en la playa llegó más tranquila de lo esperado.

No hubo caos desmedido, ni guerras innecesarias por motos de agua o surf. Solo el constante romper de las olas, el brillo dorado del sol naciente estirándose sobre el horizonte, y la renuente realización de que su breve escapada estab...

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