Capítulo 38: Demasiado tarde

El resplandor estéril de las luces fluorescentes zumbaba débilmente sobre ellos mientras el equipo se deslizaba por los laberintos de la fortaleza tecnológica de Kaito. El aire estaba frío, cargado con el zumbido de servidores de alta potencia y el tenue sabor metálico de la maquinaria. Cada paso qu...

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