Capítulo 41: Dormir

El mundo seguía adelante, pero el ático parecía suspendido en el tiempo. Las semanas se habían convertido en más de un mes, y Seraphina Cross permanecía en un sueño profundo—un coma que le había robado el movimiento, la risa y la aguda inteligencia que Damon extrañaba más de lo que se atrevía a admi...

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