Capítulo 49: Un paso. Luego otro.

El sol de la mañana bañaba la villa con una suave luz dorada que se filtraba por las altas ventanas de la habitación de Sera. El leve aroma a lavanda flotaba en el aire, mezclándose con las frescas rosas que Damon había traído antes. Afuera, el leve canto de los pájaros anunciaba la llegada de la pr...

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