Capítulo 8

Me remuevo en la cama sintiendo mis manos entumecidas y adoloridas, este hombre es un maldito animal, no sé cómo fue capaz de dejarme amarrada a la cama, no pude dormir muy bien porque esta posición o es nada cómoda y cada segundo me despertaba pensando que el maldito estaría encima de mí haciéndome...

Inicia sesión y continúa leyendo