Capítulo 189: La forma de los pequeños cambios

La luz de la mañana tocaba el huerto en tonos apagados, suaves y grises, como si el sol mismo dudara en comprometerse. El aire llevaba un toque húmedo, la promesa de lluvia escondida en algún lugar más allá de las colinas. Isla estaba de pie en la puerta con su chal recogido cerca, sus ojos recorrie...

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