Capítulo 206: La primera agitación

La noche se profundizaba con una quietud que no tranquilizaba. Se apretaba en el aire como un aliento contenido, pesado e inquebrantable, llenando el huerto hasta que incluso el más leve susurro de las hojas parecía deliberado. El árbol del silencio se erguía en el centro, su oscura copa balanceándo...

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