La caja más grande

Mi boca se abre, pero no sale ningún sonido. Odio que mi corazón esté latiendo tan fuerte que temo que todos en la casa puedan escucharlo.

—Es tan…

—¿Hermoso? —termina él, con esa pequeña inclinación arrogante de su cabeza.

Sí. Pero esa no era la palabra que buscaba. Exquisito. Impresionante. Imp...

Inicia sesión y continúa leyendo