68. NOCHE LARGA

LAYLA || ENTONCES

Layla deslizó su dedo por la pantalla de su teléfono y se tumbó en la cama de Leon con una taza de té humeante a su lado. Leon, siendo Leon, fruncía el ceño ante algo en la pantalla de su laptop. Una de sus manos jugaba con el cabello de ella mientras la otra seguía en el te...

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