El reencuentro de dos almas...

Los labios suaves de Lucía descendieron por el cuello de Harris, dejando besos suaves y húmedos. Al llegar a su clavícula, se detuvo y lo escuchó gemir, como si ese pequeño gesto hubiese sido premonitorio de lo que estaba por suceder.

—No sabes lo que me haces, Lucía —susurró él contra su oído—. No ...

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