El jardín del engaño. Capítulo 36. La grieta en la jaula.

Rosemary

El silencio después de la tormenta siempre me pareció lo más aterrador. No los gritos, no las amenazas, no la violencia… sino esa calma extraña, como el aire cargado de electricidad antes de que caiga un rayo. Así estaba la habitación después de que Sandy saliera dejándome con la mejil...

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