

Juego Perverso
M.T · Completado · 101.6k Palabras
Introducción
Camila Olivares es una buena estudiante, pero debido a los problemas económicos de su familia se ve forzada a buscar la ayuda de Sofía, una chica de la cual se sospecha es una prostituta, y aprovechando la desesperación de Camila, Sofía la emplea como una participante en un juego perverso donde las mentes más perturbadas pueden comprar a quien sea y Camila deberá soportar los juegos que su comprador demande para ayudar a su familia, pero para su desgracia deberá jugar con el temible Julián Cazares
Capítulo 1
"... ¿Te atreves a conocer el infierno de Julián Cazares? ..."
—¿Por qué no me besaste mientras hacíamos el amor?— dijo la sensual morena mientras enrollaba su figura desnuda en las finas sabanas de seda de la cama del hombre, del cual ella parecía estar fascinada.
Se encontraban en la habitación de uno de los departamentos más lujosos de la Ciudad de México y por supuesto, este le pertenecía al soltero más codiciado de la ciudad, Julián Cazares, el diputado más justo e inteligente que la cámara legislativa había tenido en mucho tiempo o al menos eso se creía de él.
Había trabajado mucho para conseguir aquel puesto y claro está, que el público que más lo apoyaba era el femenino, no solo por su atractivo, según ellas, sino por su bondad, aunque realmente su campaña electoral había sido un teatro que había odiado hasta el último segundo, pero que al final había rendido sus frutos.
Uno de los beneficios de los cuales más disfrutaba, eran las fiestas desmedidas que los empresarios más adinerados del país realizaban con el propósito de darle un jugoso soborno, maletines llenos con varios miles de dólares para conseguir contratos jugosos con el gobierno de la ciudad, aunque por supuesto, Julián aprovechaba esos eventos para encontrar entre los invitados una buena "Distracción" amigas de una sola noche con las que "Jugaba" hasta el amanecer y vaya que se había divertido aquella noche.
La sensual morena se había parado no muy lejos de él, era la segunda esposa de un rico empresario dueño de una empresa constructora, le había dado una buena mordida para esconder evidencias sobre una investigación que se estaba llevando a cabo por causa de un par de muertes debido a una negligencia de su equipo de ingenieros; por supuesto Julián no había rechazado su pequeña donación, aunque no sin antes disfrutar del increíble cuerpo de la mujer que le había dedicado un par de miradas y un buen sexo express en el baño durante la fiesta, pero Julián no era de los hombres que se conformaban con eso, él deseaba mucho más y por esa razón aquella fabulosa mujer había llegado a su departamento de "Juegos"
Después de la noche que habían tenido, él ya no sentía el más mínimo interés por ella, así que mantenía la mirada fija fuera del ventanal de la sala de estar, mientras acomodaba su corbata en su lugar para ir a trabajar, los rayos del sol aparecerían sobre los edificios en cualquier momento y aunque él no era del tipo romántico, apreciaba la vista cada vez que visitaba ese sitio.
—Muñeca parece que estás confundida —dijo después de soltar un suspiro y ver su figura en el reflejo del vidrio, así que giro hacia ella con una expresión sería para después tomar la chaqueta de su traje azul marino. La mujer, un tanto desconcertada, frunció el ceño, parecía no comprender a qué se refería Julián — yo jamás hago el amor con nadie, lo que tuvimos solo fue sexo.
—¿No fue especial para ti?— su voz aparentemente sonó perpleja e inocente, aunque probablemente no lo era. Creyendo que tal vez podría convencer a Julián de volver a la cama y no ir a trabajar, se acercó a él con una mirada coqueta.
—¿Especial? ¡Por favor! ¿Es un chiste verdad?— soltó una pequeña carcajada al escuchar aquellas palabras, las mujeres siempre le habían parecido ingenuas y tontas por creer que por un poco de sexo ya eran dueñas de él y su corazón, patrañas en las que no creía.
—Sé que soy casada, pero eso puede arreglarse— le insinuó mientras poco a poco habría la sabana que había tomado de la cama de Julián para cubrirse. Esa chica tenía a penas 29 años de edad, las facciones de su rostro eran hermosas y su cuerpo, el cual ya había pasado por una sala de quirófano, tenía curvas bastante pronunciadas que habían llamado, precisamente la atención de Julián, pero a pesar de que la mujer dejo caer la sabana— me estuviste buscando toda la noche, dijiste que estabas muy interesado en mí.
—Efectivamente—dijo en cierto tono burlón— estaba interesado en ti, pero ahora no, así que tapate y vístete, en un par de horas alguien vendrá a limpiar, no quiero que alguien te vea aquí.
Julián miró el reloj en su muñeca que hacía unos minutos se había puesto sobre su muñeca, para verificar el tiempo que tenía para trasladarse a su oficina, aún tenía un par de minutos, pero no pensaba desperdiciarlo con ella.
—Ahora me doy cuenta de que todos los rumores sobre ti son totalmente ciertos —soltó como si aquellas palabras tuvieran el poder de herirlo, era cierto que había rumores sobre Julián, sobre el cómo utilizaba a las mujeres y siempre obtenía lo que quería, sexo, pero ninguna de ellas era lo suficientemente audaz como para atarlo al matrimonio o mínimo una relación a corto plazo.
—No eres más que un imbécil que solo vale una noche porque dudo que realmente seas un hombre—expreso aquella chica mientras subía los peldaños para poder ir a la habitación, tomar su ropa e irse—incluso que tengas corazón.
—¿Acaso eso te importo para acostarte conmigo?—él le dedicó una sonrisa perversa—no eres más que una zorra, por esa razón, para mí las mujeres no son más que un juguete sexual que puedo desechar.
—¿Así que solo somos un juguete?— tomo la mano de Julián para que la palma de su mano tocara su pecho desnudo— el día que menos lo esperes, una mujer aparecerá en tu vida y te arrebatara el corazón, pero ¿Sabes que será lo más satisfactorio para mí?
—Verte suplicar por el amor de uno de tus juguetes—le reveló con una sonrisa arrogante.
—Estaré esperando ese día— la reto, aunque sabía que en el mundo no había nadie para él, pues esa chica que le había arrebatado el corazón estaba dos metros bajo tierra y a menos de que un milagro se la devolviera, no había forma de que su corazón volviera a sentir algo por alguien, además a esas alturas de su vida, no quería volver a sentir ese tipo de sentimiento. ¿De qué servía?
Julián pensaba que el amor era una perdida de tiempo y más que nada dolor, o al menos así había sido para él. Se había dado cuenta de que el amor no era más que una debilidad, sobre todo en los «negocios» no puedes confiar en nada ni nadie, ni mucho menos en las mujeres.
Las manos de la morena jalaron el cuello de Julián para corresponder a un beso apasionado que volvió a encender esa llama pasional entre los dos. Esa acción, tan impulsiva, le hizo entender a Julián que tal y como lo había pensado, esa mujer era como todas las zorras que habían caído en sus redes, despreciable e hipócrita, pero ya que nunca volvía a repetir a ninguno de sus juguetes sexuales, no tenía problemas con eso mientras tuvieran un buen culo que saciara su más pecaminosa necesidad.
Sus manos recorrieron las curvas de sus caderas hasta llegar a sus glúteos voluminosos que le hicieron caer en tentación de nuevo, los masajeo suavemente y le azoto una buena nalgada. La piel de la chica se erizó bajo la palma de su mano, le fascinaba, le excitaba e incitaba a volver a probarla antes de partir.
Su mano viajó hasta su vientre y sus dedos bajaron lentamente hasta encontrar su sexo completamente depilado, era tan suave y delicado. Cuando la mujer lo sintió tentando con delicadeza, gimió al momento de rozar su dedo sobre la superficie de su flor sexual.
Julián la alzó y la llevo hasta un sofá, dejándola ferozmente para tomar sus piernas y abrirlas para él. Ella lo anhelaba y su mirada le suplicaba que la tomara y Julián no lo dudo ni un instante, deseaba poseerla, penetrarla, hacerle saber que ella se había convertido en una zorra más en su lista, un simple juguete, pero debia irse.
El trabajo, antes que nada, era lo más importante y no le agradaba llegar tarde.
Observo el reloj de su muñeca, tenía cinco minutos, no desperdicio el tiempo en pequeñeces, la tomó de los glúteos para acercarla un poco más hacia él, después subió sus piernas a sus hombros para observar en todo en su esplendor la lubricación que le había generado un simple roce sobre su clítoris. Se acomodó y acerco sus labios para lamer sobre la cima, la punta de su clítoris, ella se arqueó, mientras él pasaba su lengua delicadamente, al principio con suavidad, probando el sabor de su lubricación para después lamer un poco más fuerte.
¡Sí!
Ella era suya y su cuerpo se lo gritaba en cada gemido y a él le enloquecía ese sonido mientras su lengua bailaba sobre su sexo, sin embargo, aquel acto de poder sobre la debilidad femenina fue interrumpido por el reloj de su muñeca, eran la siete en punto.
Repentinamente, Julián se alejó y observó que ella se levantó confundida.
—¿A dónde vas?— reclamó llevando su mano hacia su vagina húmeda, la acaricio con suavidad y deseo, invitándolo a seguir.
—Al trabajo, nena— explicó al momento que anudaba su corbata azul.
—¿No quieres terminar lo que empezaste?— cuestionó en un tono seductor sin dejar de tocarse para el placer de Julián y el suyo.
—¿Quieres que llegue tarde al trabajo por estar cogiéndote?—cuestiono Julián en burla— nena, tengo mejores cosas que hacer.
La excitada mujer frunció el ceño y alejo su mano de su sexo, se levantó y enseguida busco sus bragas. Julián la observo con placer y al alzar la vista, las vio encima de la lámpara de la cama, eran rojas y sensuales.
Después de unos segundos, ella vio su ropa interior y rápidamente las tomó, se las puso sin dejar de dirigirle una mirada feroz, eso le agradaba a Julián.
—Estúpido— le dijo al pasar cerca de él. Esa era la frase que todas sus zorras le decían al amanecer, les gustaba jugar con él, pero no sabían quién era realmente y no conocían al monstruo que él escondía debajo de su ropa elegante y su imagen de un buen político
Últimos capítulos
#76 Capítulo Final
Última actualización: 2/14/2025#75 Capítulo 74
Última actualización: 2/14/2025#74 Capítulo 73
Última actualización: 2/14/2025#73 Capítulo 72
Última actualización: 2/14/2025#72 Capítulo 71
Última actualización: 2/14/2025#71 Capítulo 70
Última actualización: 2/14/2025#70 Capítulo 69
Última actualización: 2/14/2025#69 Capítulo 68
Última actualización: 2/14/2025#68 Capítulo 67
Última actualización: 2/14/2025#67 Capítulo 66
Última actualización: 2/14/2025
Te podría gustar 😍
Regla número 1 - Sin Compañeros
«Déjame ir», lloriqueo, mi cuerpo tiembla de necesidad. «No quiero que me toques».
Me caigo sobre la cama y luego me doy la vuelta para mirarlo fijamente. Los tatuajes oscuros de los hombros cincelados de Domonic se estremecen y se expanden con el movimiento de su pecho. Su profunda sonrisa llena de arrogancia se extiende detrás de sí mismo para cerrar la puerta.
Mordiéndose el labio, se dirige hacia mí, con la mano pegada a la costura de sus pantalones y a la protuberancia que hay allí.
«¿Estás seguro de que no quieres que te toque?» Susurra, desatando el nudo y metiendo una mano dentro. «Porque juro por Dios que eso es todo lo que quería hacer. Todos los días, desde el momento en que entraste en nuestro bar, percibí tu sabor perfecto desde el otro lado de la habitación».
Draven, nuevo en el mundo de las palancas de cambio, es un humano que huye. Una chica hermosa a la que nadie podría proteger. Domonic es el frío alfa de la manada de lobos rojos. Una hermandad de doce lobos que viven según doce reglas. Reglas que juraron que NUNCA podrían romperse.
Especialmente, regla número uno: No hay amigos
Cuando Draven conoce a Domonic, sabe que ella es su compañera, pero Draven no tiene ni idea de lo que es una pareja, solo que se ha enamorado de un cambiaformas. Un alfa que le romperá el corazón al hacer que se vaya. Prometiéndose a sí misma que nunca lo perdonará, desaparece.
Pero no sabe nada del bebé que está embarazada ni de que, desde el momento en que se fue, Domonic decidió que las reglas estaban hechas para romperlas, ¿y ahora volverá a encontrarla? ¿Lo perdonará?
Secretaria ¿Te quieres acostar conmigo?
Tal vez por eso ninguna le duraba más de dos semanas, es que se cansaba rápidamente de ellas, sin embargo, Valeria se negó, provocando que él la persiguiera pensando distintas estrategias para lograr su cometido, eso sin dejar de lado su diversión con las demás mujeres.
Sin darse cuenta, Valeria se convirtió en su mano derecha y él la necesitaba hasta para respirar, no obstante no reconoció su amor hasta que ella llegó a su límite y partió.
Mimada por multimillonarios tras ser traicionada
Emily y su multimillonario esposo estaban en un matrimonio contractual; ella esperaba ganarse su amor a través del esfuerzo. Sin embargo, cuando su esposo apareció con una mujer embarazada, ella se desesperó. Después de ser expulsada, Emily, sin hogar, fue acogida por un misterioso multimillonario. ¿Quién era él? ¿Cómo conocía a Emily? Y lo que es más importante, Emily estaba embarazada.
La Redención de la Ex-Esposa: Un Amor Renacido
El dolor de mi embarazo fuera del matrimonio es una herida de la que nunca puedo hablar, ya que el padre del niño desapareció sin dejar rastro. Justo cuando estaba a punto de quitarme la vida, Henry apareció, ofreciéndome un hogar y prometiendo tratar a mi hijo sin padre como si fuera suyo.
Siempre le he estado agradecida por salvarme ese día, por eso he soportado la humillación de este matrimonio desigual durante tanto tiempo.
Pero todo cambió cuando su antigua llama, Isabella Scott, regresó.
Ahora, estoy lista para firmar los papeles del divorcio, pero Henry exige diez millones de dólares como precio de mi libertad—una suma que nunca podría reunir.
Lo miré a los ojos y dije fríamente—Diez millones de dólares para comprar tu corazón.
Henry, el heredero más poderoso de Wall Street, es un ex paciente cardíaco. Nunca sospechará que su llamada ex esposa vergonzosa orquestó el corazón que late en su pecho.
Una Reina de Hielo en Venta
Alice es una hermosa patinadora artística de dieciocho años. Su carrera está a punto de culminar cuando su cruel padrastro la vende a una familia adinerada, los Sullivan, para que se convierta en la esposa de su hijo menor. Alice asume que hay una razón por la que un hombre apuesto quiere casarse con una chica extraña, especialmente si la familia forma parte de una conocida organización criminal. ¿Encontrará la manera de derretir los corazones helados y dejarla ir? ¿O podrá escapar antes de que sea demasiado tarde?
Jackson Johnson
Niñera para el jefe de la mafia
Emplea a la joven Victoria para que cuide a su hijo. Después de pasar una noche de borrachera juntos, está embarazada de él.
Sus vidas están entrelazadas ahora y terminan en un matrimonio sin amor. Ella encuentra consuelo en los brazos de otro.
Lee para descubrir qué sucede cuando la niñera y la esposa del jefe de la mafia llevan al enemigo directamente a la puerta de su casa.
Cicatrices
Amelie solo quería vivir una vida sencilla fuera del foco de atención de su linaje alfa. Sintió que tenía eso cuando encontró a su primer compañero. Después de años juntos, su pareja no era el hombre que decía ser. Amelie se ve obligada a realizar el ritual de rechazo para hacerse sentir. Su libertad tiene un precio, uno de los cuales es una fea cicatriz negra.
«¡Nada! ¡No hay nada! ¡Tráela de vuelta!» Grito con cada parte de mi ser. Lo supe antes de que dijera nada. La sentí en mi corazón despedirse y soltarla. En ese momento, un dolor inimaginable se apoderó de mi corazón.
Alpha Gideon Alios pierde a su pareja, en el que debería ser el día más feliz de su vida, el nacimiento de sus gemelos. Gideon no tiene tiempo para llorar, se queda sin pareja, solo y es padre recién soltero de dos hijas pequeñas. Gideon no deja que su tristeza se manifieste como si fuera una muestra de debilidad, y es el Alfa de la Guardia Durit, el ejército y brazo investigador del Consejo; no tiene tiempo para la debilidad.
Amelie Ashwood y Gideon Alios son dos hombres lobo rotos a los que el destino ha torcido. Esta es su segunda oportunidad de amar, ¿o es la primera? Cuando estos dos compañeros predestinados se unen, siniestros complots cobran vida a su alrededor. ¿Cómo se unirán para mantener a salvo lo que consideran lo más preciado?
Juego del Destino
Cuando Finlay la encuentra, ella está viviendo entre humanos. Él está cautivado por la obstinada loba que se niega a reconocer su existencia. Puede que no sea su compañera, pero él quiere que sea parte de su manada, lobo latente o no.
Amie no puede resistirse al Alfa que entra en su vida y la arrastra de vuelta a la vida de manada. No solo se encuentra más feliz de lo que ha estado en mucho tiempo, su lobo finalmente viene a ella. Finlay no es su compañero, pero se convierte en su mejor amigo. Juntos, con los otros lobos principales de la manada, trabajan para crear la mejor y más fuerte manada.
Cuando llega el momento de los juegos de la manada, el evento que decide el rango de las manadas para los próximos diez años, Amie necesita enfrentarse a su antigua manada. Cuando ve al hombre que la rechazó por primera vez en diez años, todo lo que pensaba que sabía se pone patas arriba. Amie y Finlay necesitan adaptarse a la nueva realidad y encontrar un camino hacia adelante para su manada. Pero, ¿los separará esta nueva situación?
Solo medio muerto
Estaba decidida a odiar al hombre con el que había estado prometida. ¡Decidido a matarlo por haberla secuestrado!
Hasta que lo conoció.
El hombre era tan exasperante y chovinista como devastadoramente hermoso y poderoso.
Kamilla no sabía qué hacer. No esperaba sentirse tan impotente ante el vínculo que los unía, ni esperaba desearlo. Kamilla menos esperaba que el poderoso Rey Vampiro pudiera necesitar alguna vez la ayuda de su pequeño yo mitad vampiro.
Pero en el momento en que Viktor parpadeó con esos hipnóticos ojos y Kamilla vio cómo de repente se convertía en un hombre diferente ante sus ojos, se dio cuenta de dos cosas. Uno: Sí, los vampiros pueden tener múltiples trastornos de personalidad. Dos: Viktor la necesitaba incluso más de lo que necesitaba sus malditas alas de murciélago.
Mis Gemelos Alfa Posesivos Para Pareja
Hilos del Destino
Tengo magia, tal como mostraron las pruebas, pero nunca se ha alineado con ninguna especie mágica conocida.
No puedo respirar fuego como un Cambiante dragón, ni lanzar maldiciones a las personas que me molestan como las Brujas. No puedo hacer pociones como una Alquimista ni seducir a la gente como una Súcubo. No quiero parecer desagradecida con el poder que tengo; es interesante y todo eso, pero realmente no tiene mucho impacto y, la mayor parte del tiempo, es prácticamente inútil. Mi habilidad mágica especial es la capacidad de ver hilos del destino.
La mayor parte de la vida es lo suficientemente molesta para mí, y lo que nunca se me ocurrió es que mi pareja es un grosero y pomposo incordio. Es un Alfa y el hermano gemelo de mi amigo.
“¿Qué estás haciendo? ¡Este es mi hogar, no puedes entrar así!” Intento mantener mi voz firme, pero cuando se da la vuelta y me fija con sus ojos dorados, me echo atrás. La mirada que me lanza es imperiosa y automáticamente bajo los ojos al suelo, como es mi costumbre. Luego me obligo a mirar de nuevo hacia arriba. Él no se da cuenta de que lo estoy mirando porque ya ha desviado la mirada de mí. Está siendo grosero, me niego a mostrar que me está asustando, aunque definitivamente lo está haciendo. Echa un vistazo alrededor y, al darse cuenta de que el único lugar donde sentarse es la pequeña mesa con sus dos sillas, señala hacia ella.
“Siéntate.” me ordena. Lo miro con desprecio. ¿Quién se cree para darme órdenes así? ¿Cómo puede alguien tan obnoxioso ser mi alma gemela? Tal vez todavía estoy dormida. Me pellizco el brazo y mis ojos se humedecen un poco por el escozor del dolor.