Capítulo 936 Un mes después, te dejaré ir

El mayordomo que entró con el botiquín se puso pálido. —Señor Hernández, la herida es demasiado grave. Debemos llamar a un médico profesional.

—No es necesario, solo dame la gasa. Un vendaje simple bastará —dijo Joseph fríamente.

Después de vendarse, bajó las escaleras, pero Cassie no estaba por n...

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