Compras de abarrotes

Lucas no estaba seguro de cuándo la agotamiento se apoderó de él, pero lo sentía en los huesos. No quería nada más que cerrar los ojos y dejar que el sueño lo venciera, pero Valentina todavía estaba extendida en su cama, perdida en una neblina de embriaguez.

Suspiró, frotándose la nuca. Cuidar de e...

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