318

Un año después

La villa cobró vida con risas y alegría en la fiesta del primer cumpleaños de las gemelas. La sala de estar estaba decorada con globos y serpentinas en tonos pastel suaves, rosas, morados y amarillos que parecían sacados de un cuento de hadas. Los regalos, atados con lazos extravagan...

Inicia sesión y continúa leyendo