Capítulo 138

El joven sirviente del sobrino de Zella, con la mano lista para verter veneno en la botella de medicina, fue atrapado repentinamente por una mano grande que llevaba guantes tácticos.

Ni siquiera vio de dónde salió la persona—solo sintió un dolor agudo en la muñeca mientras todo su brazo se entumecí...

Inicia sesión y continúa leyendo