Capítulo 39

El pasillo permanecía mortalmente silencioso, como si el aire mismo se hubiera congelado. La alarma penetrante que acababa de ser silenciada aún resonaba en los oídos de todos, creando un contraste surrealista con la calma actual.

Neil, el líder del equipo B, permanecía inmóvil con la boca abierta,...

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