Capítulo 11 Capítulo 11

James

—Eso es todo —dije ayudándola a poner de pie—. Arréglate y continúa con tu trabajo. No olvides que debes estar disponible para mí, cuando lo pida.

—Sí señor Evans.

—¿Leíste el contrato? —ella me miró como si hubiese cometido un gran pecado.

—La mayoría —musitó.

Fui hasta donde ella y ...

Inicia sesión y continúa leyendo