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NARRA BERENICE

Todo a mi alrededor era blanco, solo había tranquilidad y claridad. No lograba ver nada, debido a la alta blancura que me rodeaba.

De repente una sombra detrás de mí me sobresaltó, pero no podía moverme. Sentía que dos imanes me pegaban al suelo; tampoco podía gritar, no encontraba ...

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