Capítulo 46: Estado de Guerra

El silencio que siguió a la lectura del mensaje fue más aterrador que cualquier grito. Era el silencio de un mundo que se detiene, el instante helado antes del impacto. La fotografía en la pantalla del teléfono, mi propia espalda, la familiar puerta del edificio, se convirtió en un símbolo de mi vul...

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