CAPÍTULO 56 EXISTE

EXISTE…

—Alana… —Alana intentó parpadear, pero le dolían los ojos. No sabía cuántas horas había llorado, y sentía dos enormes yunques en sus ojos que le impedían abrirlos—. Alana… —Tomó una respiración completa, que dejó un dolor en el pecho y luego removió su cabeza.

Su cuello estaba entumecido, ...

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