Capítulo 8 Ocho

Bicky

Sus manos bajan y me rodean la cintura, me atraen contra su pecho. El escritorio detrás de mí se convierte en apoyo cuando me hace retroceder hasta sentir el borde contra mis caderas. Su boca recorre la mía con desesperación, y por un momento olvido quién soy, dónde estoy y lo que deberí...

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