

Secretos, crónica de una investigación policial
mireya prado · En curso · 158.2k Palabras
Introducción
Secretos: es una cautivadora obra basada en hechos reales que refleja la realidad de nuestra sociedad contemporánea. Esta realidad se encuentra marcada por diversos problemas que afectan a la juventud actual, en un contexto en el que los valores se ven gravemente deteriorados.
Capítulo 1
Domingo Día 2, 10:00 PM.
Venezuela Caracas, Distrito Capital.
En una noche fresca y tranquila, Natasha Pinto, de 39 años, se encontraba en su hogar en Los Rosales, durmiendo en su habitación junto a su esposo, Osmar Oviedo, de 47 años. Médico cirujano en traumatología, ambos residían en un elegante pero pequeño departamento junto a sus dos hijos: Leonardo, de 19 años, y Aron, de 8 años, quienes dormían en habitaciones separadas.
Ella se encontraba fatigada tras un día laboral agitado y, al quedarse dormida profundamente, fue abruptamente despertada por el estruendo de una moto que pasaba por la carretera principal. Tras abrir los ojos en sorpresa, optó por cerrarlos nuevamente para tratar de recuperar el sueño.
Más tarde, al escuchar el sonido de un mensaje de texto en su teléfono celular, elevó la mirada hacia la mesa de noche. Con un bostezo, se levantó lentamente de la cama para no despertar a su esposo y se desprendió de la sábana con cautela. A pesar de estar lidiando con el cansancio, una vez sentada, se pasó la mano por la cara y el cuello antes de tomar el celular. Al leer el mensaje, su mirada se intensificó, y la sorpresa la invadió al descubrir su contenido, que se resumía en pocas palabras:
—¡Ayúdame!, por favor.
Ella reacciona dándose media vuelta y observando a su esposo dormido. Luego, decide levantarse con calma, ajustándose el pijama pero de manera relajada. Se pone las pantuflas y se dirige a la cocina. Avanza por el pasillo, moviendo su cuello lacio con una expresión de malestar, enciende la luz y busca en la nevera una jarra de agua, sirviéndose en un vaso de vidrio. Al hacerlo, echa un vistazo a las habitaciones de los niños; su mirada se detiene pensativa.
Al finalizar, deposita el vaso en el mesón, sumida en sus pensamientos.
—¿Quién será? El que me envió ese mensaje es preocupante recibirlo a esta hora de la noche. ¡Humm! —murmuró mientras se dirigía a su despacho, cuyas puertas corredizas emitieron un suave sonido al abrirse.
Se sentó en su sillón frente al escritorio, encendió la lámpara y tomó su teléfono fijo. Soltando un ligero suspiro, observó el dispositivo durante unos segundos, reflexionando sobre el mensaje, mientras sacudía la cabeza en señal de desasosiego. Ella baja la mirada y busca en una de sus gavetas la agenda de color marrón, la coloca a un lado en el escritorio y, detrás de ella, su teléfono celular personal. Suspira mientras abre la agenda y localiza, con su dedo índice, el número telefónico de un amigo y colega de muchos años en quien confía plenamente: un agente llamado Saimo Noriega. Inmediatamente, marca el número y realiza la llamada al instante. (Llamada entrante)
Al mismo tiempo, en el centro de la ciudad de Caracas, en la urbanización El Marqués, residía Saimo en una elegante y amplia casa de dos pisos, custodiada por un equipo de hombres armados que vigilaban la propiedad. En ese momento, se encontraba durmiendo en su lujosa habitación, boca abajo y cubierto parcialmente por una sábana blanca, vistiendo solo ropa interior. A su lado estaba su querida esposa, Violeta Mejías, abogada de profesión, quien se encontraba sentada concentrada en la lectura de un libro jurídico, pasando las hojas con sumo cuidado para no molestarlo. De repente, el teléfono celular de él comenzó a sonar. Ignorando la llamada, se colocó la almohada en la cabeza en un gesto de incomodidad, pero al notar que no respondía, se inquietó y le habló en un tono suave y bajo:
—¡Amor!
—¿Qué? —respondió él, levantando la cabeza y ajustando su expresión facial con sorpresa. —No escuchas. Presta atención, puede ser una emergencia, ¿no crees? Fíjate en la hora, cielo. —Escuchando de nuevo el celular— ¡Está sonando de nuevo!
Saimo levantó la mirada, observándola con delicadeza y pasando su mano por sus ojos, pero se dio cuenta de que ella estaba leyendo un libro en ese momento. Su rostro mostró una expresión de descontento.
—¡Amor! ¿Por qué estás leyendo a esta hora de la noche? Son las 10:20 PM. Deja que el teléfono suene. Además, es tarde, no estoy para nadie y no quiero contestar. No estoy en disposición de atender a nadie en este momento, por favor. ¿De acuerdo? —dice, agitando sus manos en señal de desacuerdo mientras ella cierra el libro y lo deja reposar sobre sus piernas. Con la mano derecha, se quita las gafas y las coloca sobre la almohada.
Luego, lo mira y añade: —¡Como si fuera la primera vez! Querido, esto ocurre en cualquier momento y casi todos los días debido a tu trabajo. Ya estoy completamente acostumbrada a ello. Sin embargo, reconozco que no siempre logro descansar, y es cierto que cada vez que recibes una llamada, debes salir de inmediato a cumplir con tus responsabilidades. Entiendo perfectamente esa situación.
Ella vuelve a centrar su atención en el libro para retomarlo, pero en ese momento suena el teléfono móvil y se muestra inquieta mientras habla, sin girar la cabeza.
—¡Atiende! —se coloca las gafas mientras toma el libro y lo abre para leer.
Sin embargo, ella parece bastante nerviosa y su expresión cambia repentinamente. —¡Amor! ¿Por qué estás leyendo a esta hora de la noche? Son las 10:20 PM. Deja que el teléfono suene. Además, es tarde, no estoy para nadie y no quiero contestar. No estoy en disposición de atender a nadie en este momento, por favor. ¿De acuerdo? —dice, agitando sus manos en señal de desacuerdo mientras cierra el libro y lo deja reposar sobre sus piernas. Con la mano derecha, se quita las gafas y las coloca sobre la almohada. Lo que la lleva a dejar escapar un suspiro que activa un cambio en su estado mental y comienza a hablar con mayor fluidez y volumen.
—Hazme el favor de atender de una vez, Saimo Noriega —dijo ella con cierto desdén. Él la miró, exhalando con frustración mientras se aparta las almohadas de la cara y sacudía la cabeza, mostrando claramente su desacuerdo. Cerrando y abriendo los ojos con desagrado, y al bajar la mano, volvió a exhalar, quejándose.
—¡Qué carajo! Amor, no te enojes, por favor. Ya hemos discutido este tema anteriormente, ¿verdad, cariño? Tengo un fuerte dolor de cabeza y mi día ha sido bastante complicado, la verdad. Además, tengo mucho trabajo. Escucha, mi reina, si me pongo a explicarte todo, podría pasar toda la noche contándotelo. ¡Eh! —dice sin ocultar una sonrisa de satisfacción, algo que la molesta a ella. —¡Lo sé! Pero, por favor, atiende qué más, no sabemos si ha ocurrido algo grave.
Saimo sujeta un suspiro y observa cómo Violeta Mejías expresa un gesto de incomodidad al voltear, y el sonido del celular interrumpe nuevamente el ambiente. Pero finalmente, decide contestar, hablando en un tono bajo:
—¿Hola? Buenas, no.
—¿Con quién tengo el gusto de hablar? —dice, pasándose la mano por la cara y bajándola mientras escucha.
Saimo, soy yo, Natasha. Lamento incomodarte a estas horas de la noche, pero realmente necesito tu ayuda. —contesta con preocupación y echando un vistazo a su celular personal, suspira y dice:
—¡De verdad necesito tu apoyo!
—No te preocupes, Natasha. Estoy aquí para ayudarte, pero dime en qué te puedo colaborar. Tú sabes, comadre, que cuentas conmigo para lo que sea.
Le susurro con voz baja. —Lo sé, amigo mío. —responde con gran preocupación. —Acabo de recibir otro mensaje solicitando ayuda por segunda vez. Saimo, ¿recuerdas que te mencioné este tema el sábado en mi boda y te pedí que rastrear ese dispositivo? Esto me tiene bastante inquieta. —suspiro profundamente al mencionarlo. Muy cabezona...
Él responde sin moverse, retirando un poco el teléfono celular para que Natasha no escuche lo que va a comentar a su esposa. —Es la comadre, amor, y tiene un pequeño inconveniente. —guiñó un ojo mientras su esposa hace un gesto de aprobación, mas le devolvió la mirada sonriendo, manifestando alegría, el retorno a la llamada. —Recuerdo perfectamente, pero le pedí al agente, Tulio, que se encargara de eso en un principio. ¿Qué ocurrió? Y disculpe la pregunta, comadre...
Natasha suspiró nuevamente, pero al mirar su celular, le responde: Siento que algo malo está sucediendo, lo sé, porque percibo que algo negativo está ocurriendo. —Aunque no tengo certeza de lo que es. Necesito su colaboración para aclarar esta inquietud, ya que mi corazón me advierte que algo malo está sucediendo o podría suceder, y deseo entender qué es. Es una corazonada que me inunda de intriga, y ruego que me ayude, Saimo.
Él se queda reflexionando sobre la noticia mientras ella implora. —Siento una opresión en el pecho que me dificulta respirar, aunque no puedo identificar la razón. Es una sensación de mal presentimiento que no me abandona. —De repente, suena su celular personal, lo que provoca que ella dirija la mirada hacia él, con el corazón acelerado y los nervios a flor de piel. Nerviosa, exclama:
—¡Espera! Un momento, Saimo, y no cuelgues, por favor. —Se dirige a la llamada con rapidez, aunque su voz refleja el miedo que siente.
Últimos capítulos
#135 Capitulo 9 episodio 1
Última actualización: 7/29/2025#134 Capitulo 8 Episodio 17 Fíjate con quien andás y te diré quién eres
Última actualización: 7/28/2025#133 Capitulo 8 Episodio 16 Fíjate con quien andás y te diré quién eres
Última actualización: 7/26/2025#132 Capitulo 8 Episodio 15 Fíjate con quien andás y te diré quién eres
Última actualización: 7/24/2025#131 Capitulo 8 Episodio 14 Fíjate con quien andás y te diré quién eres
Última actualización: 7/23/2025#130 Capitulo 8 Episodio 13 Fíjate con quien andás y te diré quién eres
Última actualización: 7/22/2025#129 Capitulo 8 Episodio 12 Fíjate con quien andás y te diré quién eres
Última actualización: 7/22/2025#128 Capitulo 8 Episodio 11 Fíjate con quien andás y te diré quién eres
Última actualización: 7/20/2025#127 Capitulo 8 Episodio 10 Fíjate con quien andás y te diré quién eres
Última actualización: 7/20/2025#126 Capitulo 8 Episodio 9 Fíjate con quien andás y te diré quién eres
Última actualización: 7/20/2025
Te podría gustar 😍
Segundas Oportunidades
—Joder, ángel, estás tan mojada.
Cuando el amante encontró su camino de regreso. Estaba embarazada hace 12 años, pero desaparecí de su vida. A medida que mi hija crece y se parece más a él, mi anhelo se profundiza. Ahora, en una gala, lo veo inesperadamente de nuevo, ahora un encantador CEO.
Amé a Nicolás con todo mi corazón durante años mientras estábamos en la universidad, pero una noche quedé embarazada, la única noche que no usamos protección. Tuve que huir de él; tenía un futuro brillante por delante, tenía un negocio para el que había sido preparado desde niño. No podía interponerme en su camino, no podía destruir sus esperanzas y sueños como el embarazo destruiría los míos, así que tuve que huir y tuve que irme a un lugar donde él no me buscara. Doce años después, soy enfermera, lo cual no era mi sueño en absoluto, pero ponía comida en la mesa y eso era lo importante. Una de mis colegas me dio entradas para ir a un Baile de Navidad y ¿con quién me encuentro? Con el amor de mi vida, el hombre del que huí, el hombre que se parece a mi hija, y en su brazo, por supuesto, estaba la modelo más hermosa. Desde que lo dejé, me aseguré de seguirlo en las redes sociales y en los periódicos; obviamente usé otro nombre en las redes sociales y siempre tenía una modelo en su brazo, siempre. La cosa es que ninguna de ellas se parecía a mí, lo que me hizo darme cuenta de que él me había superado. Verlo en la vida real y no solo en mi teléfono o en los periódicos me arrancó el corazón del pecho, especialmente con la modelo a su lado.
Una hermosa coincidencia
La Cachorra del Príncipe Licántropo
—Pronto estarás rogándome. Y cuando lo hagas—te usaré como me plazca, y luego te rechazaré.
—
Cuando Violet Hastings comienza su primer año en la Academia de Cambiantes Starlight, solo quiere dos cosas: honrar el legado de su madre convirtiéndose en una sanadora hábil para su manada y pasar por la academia sin que nadie la llame rara por su extraña condición ocular.
Las cosas toman un giro dramático cuando descubre que Kylan, el arrogante heredero al trono de los Licántropos que ha hecho su vida miserable desde el momento en que se conocieron, es su compañero.
Kylan, conocido por su personalidad fría y sus maneras crueles, está lejos de estar contento. Se niega a aceptar a Violet como su compañera, pero tampoco quiere rechazarla. En cambio, la ve como su cachorrita y está decidido a hacer su vida aún más un infierno.
Como si lidiar con el tormento de Kylan no fuera suficiente, Violet comienza a descubrir secretos sobre su pasado que cambian todo lo que pensaba que sabía. ¿De dónde viene realmente? ¿Cuál es el secreto detrás de sus ojos? ¿Y ha sido toda su vida una mentira?
Mi Esposo Quiere Un Matrimonio Abierto
El mundo de Julie se desmorona cuando su esposo, Ryan, revela que quiere un matrimonio abierto. Su razón: necesita un hijo ya que no han podido tener uno. Julie acepta a regañadientes para salvar su matrimonio.
Al día siguiente, Ryan regresa a casa con su secretaria, confirmando la sospecha de Julie de que su aventura estaba ocurriendo a sus espaldas.
Julie, con el corazón roto y llena de rabia, busca consuelo en un bar, donde conoce a un fascinante desconocido llamado Luke, quien cambia las reglas del juego. Julie se confía a Luke mientras beben, y él propone un plan arriesgado: él actuará como su "novio" para darle la vuelta a la situación con Ryan.
Julie acepta, desencadenando una serie de eventos que desafiarán todo lo que creía saber sobre el amor, la lealtad y sobre sí misma.
Una Reina de Hielo en Venta
Alice es una hermosa patinadora artística de dieciocho años. Su carrera está a punto de culminar cuando su cruel padrastro la vende a una familia adinerada, los Sullivan, para que se convierta en la esposa de su hijo menor. Alice asume que hay una razón por la que un hombre apuesto quiere casarse con una chica extraña, especialmente si la familia forma parte de una conocida organización criminal. ¿Encontrará la manera de derretir los corazones helados y dejarla ir? ¿O podrá escapar antes de que sea demasiado tarde?
Sr. Ryan
Se acercó con una expresión oscura y hambrienta,
tan cerca,
sus manos alcanzaron mi rostro y presionó su cuerpo contra el mío.
Su boca se apoderó de la mía con impaciencia, con un poco de rudeza.
Su lengua me dejó sin aliento.
«Si no vas conmigo, te follaré aquí mismo». Susurró.
Katherine mantuvo su virginidad durante años, incluso después de cumplir 18 años. Pero un día, conoció a un hombre extremadamente sexual, Nathan Ryan, en el club. Tenía los ojos azules más seductores que jamás haya visto, una barbilla bien definida, cabello rubio casi dorado, labios carnosos, perfectamente dibujados, y la sonrisa más asombrosa, con dientes perfectos y esos malditos hoyuelos. Increíblemente sexy.
Ella y él tuvieron una hermosa y sexy aventura de una noche...
Katherine pensó que tal vez no volvería a ver a ese hombre.
Pero el destino tiene otro plan
Katherine está a punto de asumir el puesto de asistente de un multimillonario propietario de una de las empresas más grandes del país y conocido por ser un hombre conquistador, autoritario y completamente irresistible. ¡Es Nathan Ryan!
¿Podrá Kate resistirse a los encantos de este hombre atractivo, poderoso y seductor?
Lea para conocer una relación desgarrada entre la ira y el deseo incontrolable de placer.
Advertencia: R18+, solo para lectores maduros.
Coronada por el Destino
—Ella solo sería una Criadora, tú serías la Luna. Una vez que esté embarazada, no la tocaría de nuevo —la mandíbula de mi pareja Leon se tensó.
Reí, un sonido amargo y roto.
—Eres increíble. Prefiero aceptar tu rechazo que vivir así.
——
Como una chica sin lobo, dejé a mi pareja y a mi manada atrás.
Entre los humanos, sobreviví convirtiéndome en una maestra de lo temporal: saltando de trabajo en trabajo... hasta que me convertí en la mejor bartender de un pequeño pueblo.
Ahí es donde me encontró el Alfa Adrian.
Nadie podía resistirse al encantador Adrian, y me uní a su misteriosa manada oculta en lo profundo del desierto.
El Torneo del Rey Alfa, que se celebra cada cuatro años, había comenzado. Más de cincuenta manadas de toda Norteamérica estaban compitiendo.
El mundo de los hombres lobo estaba al borde de una revolución. Fue entonces cuando volví a ver a Leon...
Dividida entre dos Alfas, no tenía idea de que lo que nos esperaba no era solo una competencia, sino una serie de pruebas brutales e implacables.
Sanando a Su Luna Rota....
Colmillos, Destino y Otras Malas Decisiones
Después de descubrir que su novio le había engañado, lo último que esperaba era tropezarse con un hombre herido en un callejón. Y definitivamente no uno con colmillos. Pero gracias a una mezcla de cócteles, vergüenza y sus cuestionables elecciones de vida, se lo lleva a casa. Resulta que no es cualquier vampiro—es un rey. Y según él, ella es su compañera predestinada.
Ahora, está atrapada con un chupasangre sobreprotector y taciturno que sigue rescatándola, una lista creciente de enemigos que quieren matarla, y una atracción innegable que hace muy difícil recordar por qué enamorarse de un vampiro es una terrible idea.
Porque si no tiene cuidado, no solo perderá su corazón—perderá su humanidad.
Dejando Ir
Esa fatídica noche lleva a Molly y a su mejor amigo Tom a guardar un secreto muy cerca de sus corazones, pero mantener este secreto también podría significar destruir cualquier oportunidad de un nuevo futuro para Molly.
Cuando el hermano mayor de Tom, Christian, conoce a Molly, su disgusto por ella es instantáneo y hace poco esfuerzo por ocultarlo. El problema es que se siente atraído por ella tanto como la detesta, y mantenerse alejado de ella empieza a convertirse en una batalla, una batalla que no está seguro de poder ganar.
Cuando el secreto de Molly se revela y ella se ve obligada a enfrentar el dolor de su pasado, ¿podrá encontrar la fuerza para quedarse y superar el dolor o huirá de todo lo que conoce, incluyendo al único hombre que le da esperanza de un futuro feliz? Una esperanza que nunca pensó volver a sentir.
Una Noche de Pasión con Mi Jefe
¿Casada con un Marido Feo? ¡No!
Mi malintencionada hermanastra me amenazó con matar a mi hermano y me obligó a casarme con un hombre del que se rumoreaba que era indescriptiblemente feo. No tuve más opción que obedecer.
Sin embargo, después de la boda, descubrí que este hombre no era nada feo; al contrario, era a la vez guapo y encantador, ¡y además era multimillonario!