Capítulo 38 C38

Anna cargó a Eva en brazos y la llevó al comedor de la planta baja. La niña lloraba desconsolada, asustada por los gritos de su padre y el movimiento apresurado de Anna al alzarla.

—No llores, mi amor —le susurró con dulzura. —Tu papá está hablando con esa señora, pero pronto vendrá a buscarte, te ...

Inicia sesión y continúa leyendo