Capítulo 121: La red se rompe

La noche los engulló cuando la puerta se cerró; nadie miró hacia atrás. La casa detrás brillaba tenuemente a través de las cortinas, la luz del fuego pulsando como un latido desvanecido.

Silas caminaba primero, las botas rechinando contra la grava, el frío atravesando su abrigo pero nunca alcanzand...

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