Capítulo 97 Diana, me gustas

Estaba tan absorta en los archivos que perdí la noción del tiempo. No tenía idea de cuánto tiempo había pasado cuando Edward abrió suavemente la puerta.

—Diana, ¿podemos hablar? —preguntó.

Me recosté en la silla y dije— Claro, ¿qué pasa?

Le hice un gesto a Edward para que se sentara en el sofá de...

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