66: Asco total

Alexandra nos miró directamente y pude ver una sonrisa cínica en sus labios, luego de eso regresó a la postura de antes y me intrigó un tanto.

—Quiero entrar —le exigí al director —, me gustaría estar al lado de mi esposa.

—No considero eso recomendable, señor Hill. Entienda que esa mujer no es su...

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